No es usual encontrarse con una vivienda como esta en un vecindario tipo, entre otros aspectos porque esta construida con 31 contenedores marítimos recuperados. La combinación de contenedores que han sido restaurados y otros que permanecen tal cual fueron adquiridos le confiere al edificio un aspecto industrial que lo convierte en un referente para el entorno urbano sobre el que sea asienta. El programa se distribuye en tres niveles con espacios abiertos e interiores de calidad. Así queda patente en el primer piso donde encontramos el espacio para vida compuesto a su vez de áreas más pequeñas que se solapan.
En el interior la mezcla dinámica de materiales combinadas con amplias superficies acristaladas que permiten que la luz inunde el interior creando una gran variedad de ambientes que permaneces conectados con un frondoso bosques y el río que se sitúa en el entorno. La transición entre el interior y el exterior cobró suma importancia en el diseño de esta casa como lo demuestran los numerosos espacios al aire libre que encontramos en cada nivel. Estos espacios al aire libre han sido especialmente diseñados para relajarse y divertirse disfrutando del clima benigno de Queensland, Australia, el lugar donde se localiza esta casa.
Dispone de cuatro habitaciones distribuidas en los dos niveles superiores anticipando posibles aumentos de la familia en un futuro. Tres se sitúan en la primera planta, mientras que el principal ocupa la tercera al completo. El original diseño del exterior se traslada al interior donde pequeños detalles sorprenden día a día a su moradores, desde los grafittis hasta el mosaico del baño de la suite principal. El interior alberga áreas como una sala de lectura, un estudio de arte un gimnasio o una piscina, este lujoso nivel contrasta con la primera impresión que puede causar desde el exterior, siendo una autentica casa de lujo realizada con materiales reciclados.